Serie: Razorland #3
Autor: Ann Aguirre
No de Páginas: 515
Editorial: GranTravesía/OCÉANO
Año: 2013 en Estados Unidos
Sinopsis: El final se acerca. Y alguien va a morir.
¿Cómo se puede parar a un enemigo superior en número?
¿Quién logrará sobrevivir?
Trébol va desentrañando todo lo que ha sucedido desde que abandonó el enclave subterráneo donde vivía. Simplemente ya no es una cazadora. Ahora una vez más es testigo de la devastación que ha sufrido la comunidad Salvación a la que pertenecía. Los engendros arrasaron con la comunidad y es evidente que cada vez son más inteligentes dejando una estela de destrucción y muerte a su paso. Trébol y sus amigos están tratando de rescatar al mayor número de gente para llevarlos a un refugio temporal y entrarán de lleno en una guerra por la supervivencia humana
Trébol tiene una estrategia, pero ¿funcionará? En la última entrega de la trilogía Enclave, los protagonistas (Trébol, Van, Tegan y Stalker) tendrán que enfrentar su última batalla y el desenlace promete hacer de esta serie una de las favoritas juveniles de todos los tiempos.
Lo que pienso de "Horda"
Terminar sagas o trilogías siempre es algo que me emociona y me pone triste al mismo tiempo, y es que ya sea que hayas leído siete libros o tres, llegas a encariñarte de la historia, de los personajes y del mundo en que transcurre todo, y aunque el mundo de la trilogía Razorland no es uno donde me gustaría vivir, Ann Aguirre hizo un gran trabajo construyéndolo y narrando las aventuras de Trébol y compañía (: Debo decir que como libro y como final me gustó bastante, y aunque siente que le falto ser un poco más épico y tener más acción, estoy bastante contenta con el libro y la trilogía pasará a ser una de mis predilectas en cuanto mundo post-apocalípticos se refiere.
Como los dos libros anteriores, Horda viene narrado desde el punto de vista de Trébol, una chica de ahora dieciséis años, que después de enfrentar una de sus pruebas mas arduas en el libro anterior, ahora se encuentra al borde de una invasión de los Engendros, y es que el número de estas criaturas ha crecido de manera exorbitante, superando por mucho a la población humana de Salvación, y depende de Trébol, Stalker, Van y Tegan encontrar ayuda en otros asentamientos humanos; pero, cuando la tragedia llega, la supervivencia de Salvación no es lo único que se encuentra peligro, ya que la horda ha declarado una guerra contra todo ser humano y todos los asentamientos que se encuentran desperdigados por las tierras salvajes, lo que significará la completa aniquilación de la raza humana, y aunque Trébol sabe que la única forma de sobrevivir es unir a todos los asentamientos para formar un frente que combata a la horda, parece que nadie va a tomar enserio a un chica de solo dieciséis años... Ahora, con todo en su contra, Trébol deberá reunir todo su coraje, valor e ingenio para convencer a otros para que se unan a la batalla, ya que ahora Trébol tiene un hogar y una familia por la cual luchar, y ella no se rendirá ante nada con tal de mantener con vida a las personas que han llegado a significar tanto para ella, incluido Van, el chico de los ojos oscuros que se ha ganado su corazón... La verdad es que con el paso de los libros me he acostumbrado a la narrativa de Ann Aguirre y si por algo se caracteriza esta autora es por su fluidez y velocidad a la hora de ir narrando capítulo tras capítulo, pero eso si, la trama tarda mucho en despegar y comenzar a tomar forma, y creo que en este libro fue donde más sentí que todo se arrastraba y la introducción tardaba bastante, pero al ser un tocho de 500 páginas puede ser comprensible, pero en cuanto comienza toda la acción y la formación del ejercito de Trébol, todo va a un ritmo casi frenético y es imposible soltar el libro (en especial la parte tres, esa fue bastante cardíaca para mí), y conforme todo se va desarrollando, muchas de las incógnitas que se plantean desde el primer libro se van aclarando, entre ellas el por qué de las existencia de los mutantes, como son los demás asentamientos humanos, por qué algunas personas fueron bajo tierra y otras no y (aunque esto tal vez era más una duda personal) por qué la trilogía se llama Razorland.
Como es normal en esta trilogía, el libro tiene sus buenas dosis de acción y peleas, y aunque hay muchas escenas explícitas de las batallas y de como la sangre salta por todas partes, siempre me ha gustado mucho que el libro tiene cierta sensación cinematográfica y es muy sencillo imaginarte todo lo que pasa como si fuera una película, y aunque el gore no es muy de mi agrado, las descripciones de Aguirre son las suficientes como para que todo lo que va sucediendo sea intenso e intrigante, además de que ver los nuevos asentamientos fue super genial, la campaña entera de reunir al ejercito, el ligero toque romántico que hay por aquí y por allá, y la tristeza de diversas muertes (hubo una en especial que si me hizo un nudo en la garganta y que se me escurriera una lágrima), hicieron que libro fuera una completa montaña rusa de emociones, y que mi corazón no dejará de latir rápido en todo momento... En definitiva, aún con los pequeños peros y detalles, el libro es genial.
El final es de esos idílicos y felices que uno normalmente no se esperaría de una historia post-apocalíptica, me gustó mucho que la autora incluyera un pequeño epílogo, porque hay veces que todo queda demasiado al aire y me da el ataque de ansiedad por no saber muy bien todo, y aunque sigo sufriendo mucho por el final que tuvo uno de mis personajes favoritos, me gustó que se le siguiera haciendo mención y que la autora dejará ese toque agridulce de final.
Los personajes ocupan un buen espacio en mi corazón, y aunque fue duro decirles adiós, me gustó mucho como maduraron y crecieron a lo largo de la historia... Trébol siempre me gustó como protagonista, y es que la chica enserio es dura y valiente, no se andaba con las típicas tonterías de otras protagonista juveniles, sino que ella tenía muy centrado cual debía ser su prioridad básica, y ni siquiera dejaba que sus hormonas se metieran en el camino, podía mantener la cabeza fría en muchas situaciones y siempre salir adelante, pero también tenía su parte sensible y dulce, y me gustó mucho la evolución que tuvo y como fue adaptándose a la superficie y a expresar todos sus sentimientos (: Sencillamente, Trébol es una gran protagonista. Van, Stalker y Tegan también siempre me gustaron mucho, uno más que los otros dos, y aunque en este libro Tegan y Stalker quedan un poco de lado por Van, me gustó mucho como la autora termino de desarrollar sus personalidades y destinos, y aunque hubo por ahí algo que no me gustó, le aplaudo a la autora por crear personajes tan maravillosos, complejos y realistas como los que escribió para este libro (tanto los protagonistas como los secundarios).
Horda es un final bien escrito y bien llevado para una trilogía que siempre lo dio todo, y aunque tal vez, como ya dije, le falto una pizca más para hacerlo épico, estoy segura a que todos los lectores de la trilogía les agradara y los mantendrá al filo de su asiento con la acción y el misterio, y aclarara muchas cosas; así que si son fans de la historia, no pueden dejar pasar este último tomo, y si aun no han comenzado a leer Razorland, ¿qué esperan? Estoy segura que no quedará defraudados (:
Como los dos libros anteriores, Horda viene narrado desde el punto de vista de Trébol, una chica de ahora dieciséis años, que después de enfrentar una de sus pruebas mas arduas en el libro anterior, ahora se encuentra al borde de una invasión de los Engendros, y es que el número de estas criaturas ha crecido de manera exorbitante, superando por mucho a la población humana de Salvación, y depende de Trébol, Stalker, Van y Tegan encontrar ayuda en otros asentamientos humanos; pero, cuando la tragedia llega, la supervivencia de Salvación no es lo único que se encuentra peligro, ya que la horda ha declarado una guerra contra todo ser humano y todos los asentamientos que se encuentran desperdigados por las tierras salvajes, lo que significará la completa aniquilación de la raza humana, y aunque Trébol sabe que la única forma de sobrevivir es unir a todos los asentamientos para formar un frente que combata a la horda, parece que nadie va a tomar enserio a un chica de solo dieciséis años... Ahora, con todo en su contra, Trébol deberá reunir todo su coraje, valor e ingenio para convencer a otros para que se unan a la batalla, ya que ahora Trébol tiene un hogar y una familia por la cual luchar, y ella no se rendirá ante nada con tal de mantener con vida a las personas que han llegado a significar tanto para ella, incluido Van, el chico de los ojos oscuros que se ha ganado su corazón... La verdad es que con el paso de los libros me he acostumbrado a la narrativa de Ann Aguirre y si por algo se caracteriza esta autora es por su fluidez y velocidad a la hora de ir narrando capítulo tras capítulo, pero eso si, la trama tarda mucho en despegar y comenzar a tomar forma, y creo que en este libro fue donde más sentí que todo se arrastraba y la introducción tardaba bastante, pero al ser un tocho de 500 páginas puede ser comprensible, pero en cuanto comienza toda la acción y la formación del ejercito de Trébol, todo va a un ritmo casi frenético y es imposible soltar el libro (en especial la parte tres, esa fue bastante cardíaca para mí), y conforme todo se va desarrollando, muchas de las incógnitas que se plantean desde el primer libro se van aclarando, entre ellas el por qué de las existencia de los mutantes, como son los demás asentamientos humanos, por qué algunas personas fueron bajo tierra y otras no y (aunque esto tal vez era más una duda personal) por qué la trilogía se llama Razorland.
Como es normal en esta trilogía, el libro tiene sus buenas dosis de acción y peleas, y aunque hay muchas escenas explícitas de las batallas y de como la sangre salta por todas partes, siempre me ha gustado mucho que el libro tiene cierta sensación cinematográfica y es muy sencillo imaginarte todo lo que pasa como si fuera una película, y aunque el gore no es muy de mi agrado, las descripciones de Aguirre son las suficientes como para que todo lo que va sucediendo sea intenso e intrigante, además de que ver los nuevos asentamientos fue super genial, la campaña entera de reunir al ejercito, el ligero toque romántico que hay por aquí y por allá, y la tristeza de diversas muertes (hubo una en especial que si me hizo un nudo en la garganta y que se me escurriera una lágrima), hicieron que libro fuera una completa montaña rusa de emociones, y que mi corazón no dejará de latir rápido en todo momento... En definitiva, aún con los pequeños peros y detalles, el libro es genial.
El final es de esos idílicos y felices que uno normalmente no se esperaría de una historia post-apocalíptica, me gustó mucho que la autora incluyera un pequeño epílogo, porque hay veces que todo queda demasiado al aire y me da el ataque de ansiedad por no saber muy bien todo, y aunque sigo sufriendo mucho por el final que tuvo uno de mis personajes favoritos, me gustó que se le siguiera haciendo mención y que la autora dejará ese toque agridulce de final.
Los personajes ocupan un buen espacio en mi corazón, y aunque fue duro decirles adiós, me gustó mucho como maduraron y crecieron a lo largo de la historia... Trébol siempre me gustó como protagonista, y es que la chica enserio es dura y valiente, no se andaba con las típicas tonterías de otras protagonista juveniles, sino que ella tenía muy centrado cual debía ser su prioridad básica, y ni siquiera dejaba que sus hormonas se metieran en el camino, podía mantener la cabeza fría en muchas situaciones y siempre salir adelante, pero también tenía su parte sensible y dulce, y me gustó mucho la evolución que tuvo y como fue adaptándose a la superficie y a expresar todos sus sentimientos (: Sencillamente, Trébol es una gran protagonista. Van, Stalker y Tegan también siempre me gustaron mucho, uno más que los otros dos, y aunque en este libro Tegan y Stalker quedan un poco de lado por Van, me gustó mucho como la autora termino de desarrollar sus personalidades y destinos, y aunque hubo por ahí algo que no me gustó, le aplaudo a la autora por crear personajes tan maravillosos, complejos y realistas como los que escribió para este libro (tanto los protagonistas como los secundarios).
Horda es un final bien escrito y bien llevado para una trilogía que siempre lo dio todo, y aunque tal vez, como ya dije, le falto una pizca más para hacerlo épico, estoy segura a que todos los lectores de la trilogía les agradara y los mantendrá al filo de su asiento con la acción y el misterio, y aclarara muchas cosas; así que si son fans de la historia, no pueden dejar pasar este último tomo, y si aun no han comenzado a leer Razorland, ¿qué esperan? Estoy segura que no quedará defraudados (:
Con la colaboración de Océano (:
Puntuación
4/5 Estrellas ;)
2 comentarios:
Hola!
Que bueno que te haya gustado tanto! Yo tenía un poco de miedo de leerlo, pero ya al leer tu reseña, se que no me defraudara :) y concuerdo contigo, Trébol es un protagonista fuerte y valiente :)
¡Un abrazo! ^^
yo ya lo leí, y me dolio mucho esa misma muerte que mencionas.
concuerdo con todo lo que dices, una gran trilogía pero...
creo yo, que lo que le faltó para ser un gran cierre, Una batalla final EPICA.... y la verdad no lo fue, en 8 paginas desarrollo la batalla final. pfffffffffff pero en fin
quede muy agradecido con Ann por esta gran serie de libros :3
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